bp Energía España ha alcanzado un acuerdo con MIGASA para el suministro de hasta 40.000 toneladas anuales de residuos industriales no alimentarios del aceite vegetal durante una década. La alianza permitirá a la energética usar estas materias primas biológicas junto con otras fósiles para coprocesar combustibles renovables en su refinería de Castellón, como HVO para el transporte pesado por carretera, o SAF para la aviación.
Olvido Moraleda, presidenta de bp España, ha declarado: “Los combustibles renovables pueden desempeñar un papel clave en la descarbonización de sectores difíciles de electrificar, como la aviación, el transporte marítimo o el transporte pesado por carretera. Cuando se utilizan a gran escala, estos combustibles pueden ayudar a reducir las emisiones del ciclo de vida de estos sectores, por lo que estamos invirtiendo y colaborando con clientes y socios como MIGASA para ampliar nuestra oferta de combustibles avanzados derivados de fuentes renovables”.
Por su parte, Antonio J. Gallego, director general de MIGASA, ha señalado: “MIGASA es una empresa familiar muy ligada a la tierra y al trabajo de los agricultores. Nuestro compromiso con el entorno social y con el medio ambiente forma parte clave de la hoja de ruta de la compañía. Uno de nuestros objetivos es contribuir a la economía circular buscando alianzas como ésta con bp, que nos permitan generar materias primas útiles para la industria energética a partir de los desechos generados por los diferentes aceites que tratamos. La aplicación de esta hoja de ruta nos ha convertido en la primera empresa del sector oleícola en España en obtener el sello ‘de Residuos a Recursos: Cero a Vertedero’, que certifica que más del 95% de los restos de nuestros procesos se reintegran a la industria como materias primas secundarias”.
Este acuerdo, firmado por un periodo de 10 años y con posibilidad de ampliación, es clave porque permite a bp asegurar la disponibilidad de materias primas para producir combustibles renovables. Incluye la posibilidad de identificar en el futuro nuevas oportunidades para la reutilización de los residuos industriales no alimentarios de aceites vegetales.
La energética tiene como parte destacada de su estrategia el coprocesamiento de materias primas biológicas en refinerías, que es la forma más rentable de producir combustibles derivados de fuentes renovables a gran escala.
Los residuos industriales no alimentarios procederán de la cadena de suministro de la industria del refino de aceites vegetales, por lo que esta alianza contribuirá también a reforzar el modelo de economía circular del sector agroalimentario español. Uno de los subsectores más importantes de esta industria en España es el de aceites y grasas, con un volumen de ventas de 16.000 millones en 2023.
Se trata, por tanto, de una alianza estratégica entre sectores de fundamentales para la economía del país. Se espera que este acuerdo ofrezca soluciones de rápida implementación y económicamente eficientes para la descarbonización de los sectores del transporte y la aviación.
Además, este es un paso más en la planeada transformación de la refinería que la energética tiene en Castellón en un hub de energía integrada que produzca no solo combustibles convencionales sino también productos derivados de fuentes renovables. En la refinería se coprocesa materia prima biológica junto con materia prima fósil desde 2016, y fue la primera refinería del mundo en recibir la certificación CORSIA, que la acredita como productora de SAF, combustible sostenible para aviación.
En términos de tecnología, las compañías incorporan sistemas de inteligencia artificial y análisis predictivo, además están adoptando medidas para reducir su impacto medioambiental y cumplir las regulaciones internacionales, y cómo no puede ser de otra manera buscando personal cualificado.
Comentarios