El Cluster de la Función Logística de Galicia y las principales asociaciones de transporte de mercancías por carretera de Galicia (Fegatramer, Apetamcor y Fetram) califican como “insuficientes” las bonificaciones que el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana van a activar para el transporte pesado a su paso por la Autopista del Atlántico.
Las cuatro entidades opinan que los peajes suponen un problema de seguridad vial, de sostenibilidad y de competitividad de las empresas gallegas ya que existe una situación de desequilibrio a lo largo del territorio español. "El mes que viene, con la finalización de la concesión y consecuente levantamiento de los peajes en la AP-7 y la AP-2, Zaragoza – Mediterráneo, un tercio de los kilómetros de peajes estatales se situarán en Galicia. Un porcentaje que se eleva hasta el 44% si analizamos los kilómetros de peajes estatales soportados por el noroeste de España. Esta es una situación gravemente perjudicial para nuestra economía que ve como los productos aquí producidos son menos competitivos por tener unos costes de desplazamiento un 50% superiores al resto del Estado como consecuencia de los peajes", explican.
Un estudio técnico realizado desde el Cluster identifica que, para que las bonificaciones sean realmente eficientes, se precisa que sean, como mínimo, del 55%, alcanzando el 100% en tramos como las circunvalaciones de las ciudades o en zonas donde la autopista debe servir como itinerario alternativo a la autovía A-55, en el entorno de O Porriño. Una tesis avalada por los datos de escaso impacto que tuvieron en el año 2015 las bonificaciones del 35% en una parte de la autopista, motivo por el cual solo duraron cinco meses en funcionamiento.
En la misma línea, el sector del transporte y la logística gallego incide en la necesidad de que, "en el caso de implantarse un sistema de cobro por el uso de las autovías, este no perjudique a los territorios periféricos". En este sentido, recordó que la misma normativa europea que acepta y aconseja el cobro de peajes por el uso de autopistas insiste en la necesidad de que los territorios periféricos tengan una consideración especial para no ver perjudicado su desarrollo económico. Así se recoge en la Directiva 2011/76/UE cuando habla de “mejorar el acceso a las regiones periféricas” y su competitividad.
El sector logístico se enfrenta a un desafío crucial: atraer y retener a los mejores profesionales en un entorno cada vez más digital y competitivo. La clave ya no es solo el salario, sino ofrecer un entorno laboral atractivo, con oportunidades de desarrollo, conciliación y reconocimiento.
La Fundación Juan XXIII, promotora de la inclusión social y laboral de personas en situación de vulnerabilidad psicosocial, ofrece soluciones de transporte flexibles que se adaptan a diversas necesidades. Su red abarca transporte multimodal y entregas multipunto, tanto para clientes B2B como B2C.
Cada vez somos más las mujeres que decidimos participar en este apasionante sector. Sector que ‘atrapa’ y en el que, aunque nos enfrentamos a grandes retos, las oportunidades de crecimiento son enormes. Es momento de romper barreras y demostrar que la logística también es un sector para mujeres.
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