ACSEP ha sido el encargado de optimizar la logística de Biosynex

ACSEP ha ayudado a Biosynex a mejorar su logística durante los últimos cinco años. Tras auditar su almacén en Alsacia y ofrecer asesoría para optimizar operaciones, implementaron IzyPro en un almacén piloto en Bélgica. El próximo paso es aplicar IzyPro en el almacén de Alsacia, en Illkirch-Graffenstaden. 

Mientras Biosynex buscaba implementar un SGA dentro de su almacén en Illkirch-Graffenstaden, Gaël Levy, director de operaciones de Biosynex, se puso en contacto con ACSEP: “Nuestro objetivo era optimizar nuestros procesos comerciales y aumentar nuestra capacidad de producción logística a nivel isoperimétrico, implementando un SGA intuitivo que facilite la integración de los preparadores de pedidos junior”.

Auditoría completa del almacén

Para lograrlo, desde enero de 2019, ACSEP llevó a cabo una auditoría completa del almacén que rápidamente condujo a una segunda misión, cuyo objetivo era identificar mejoras rápidas dentro del almacén. Al mismo tiempo, ACSEP elaboró un dossier de funcionamiento en previsión del futuro despliegue de un SGA. 

“La idea era madurar el proyecto internamente, al tiempo que avanzábamos en la mejora de nuestra organización. Fue en ese momento cuando llegó la crisis de la Covid-19 y tuvimos que detener todo”, aclara Gaël Levy. 

Debido a la actividad de Biosynex, la epidemia acaparó toda la atención de la empresa. Los proyectos logísticos fueron puestos en espera. “Ya en ese momento teníamos una organización logística que funcionaba gracias al desarrollo de módulos adicionales en nuestro ERP Navision y a las mejoras rápidas identificadas e implementadas por ACSEP. Por lo tanto, la implementación del SGA quedó en suspenso”, continúa Levy.

Almacén piloto con IzyPro

Desde entonces, el grupo ha experimentado un considerable crecimiento, especialmente a través de la adquisición o participación en varias empresas y la apertura de sucursales y almacenes en el extranjero. Así, con motivo de la apertura de su filial en Bélgica y la creación de un almacén en Wavre (al sureste de Bruselas) a finales de 2022, Biosynex quiso convertirlo en un piloto. El grupo desplegó el ERP que ya estaba presente en Illkirch, así como el SGA IzyPro.

Jean-Pierre Gautier, director de negocios de ACSEP, explica: “El objetivo era duplicar la configuración del almacén en Illkirch y agregarle el SGA IzyPro. Esto nos permitió implementar el sistema informático y los procesos que identificamos en el dossier de funcionamiento en un almacén más pequeño, con un alcance más simple y menos referencias de productos”.

“El almacén funciona muy bien y los colaboradores están encantados con IzyPro, que han aprendido a manejarlo muy rápidamente”, se congratula Levy. “El SGA cumple con nuestras expectativas comerciales, como la preparación por oleadas, la recolección dinámica y el control mediante PDA. Y cuando recurrimos a trabajadores temporales que no tienen experiencia con un SGA, se adaptan rápidamente a IzyPro, lo que ahorra mucho tiempo. Además, enviamos regularmente colaboradores de Illkirch para capacitar a nuestros futuros usuarios clave de IzyPro y facilitar la gestión del cambio”.

Implementación de IzyPro en Alsacia

Desde el comienzo de las negociaciones entre Biosynex y ACSEP a principios de 2019, el proyecto para el almacén de Illkrich-Graffenstad ha evolucionado considerablemente. La empresa ha experimentado un crecimiento muy fuerte y el alcance técnico e informático ha cambiado, ya que Biosynex ha instalado el sistema de embalaje automatizado CVP Impack de Sparck Technologies, así como la estación de carga de TDI.

“Tenemos un trabajo de redimensionamiento y optimización del almacén que realizar para adaptarnos a la evolución del grupo”, destaca Levy. Además, ACSEP tendrá que interconectar IzyPro con las nuevas soluciones para que Biosynex disponga de una única cadena de pedidos orquestada por el SGA.

“Durante más de 5 años, hemos estado muy satisfechos con la experiencia de los equipos de ACSEP. Su conocimiento del negocio y su dominio de los sistemas informáticos son innegables. Son reactivos, amables y siempre ofrecen buenos consejos. ¡Nunca hemos quedado decepcionados, ya sea en términos de calidad o de personas!”, concluye Levy.