Jungheinrich ha entregado su carretilla número 100.000 con batería de iones de litio, se trata de la carretilla retráctil ETV 216i entregada junto con 15 carretillas idénticas al almacén de Amazon en Leipzig, donde ya están operativas otras 140 carretillas eléctricas de Jungheinrich.
Christian Erlach, miembro de la junta de administración y máximo responsable del área de ventas de Jungheinrich explica: “La entrega de la carretilla con batería de iones de litio número 100.000 es un hito especial para nosotros en Jungheinrich y del que estamos muy orgullosos. Como pioneros en electromovilidad dentro del almacén, fuimos el primer fabricante en confiar en la eficiente tecnología de iones de litio, y con ello cambiamos nuestra industria para siempre”.
En comparación con una carretilla diésel de la misma clase a nivel de rendimiento, una carretilla eléctrica con batería de iones de litio emite menos de la mitad de CO₂ durante toda su vida útil, incluida su fabricación. Mediante el uso de electricidad procedente de fuentes de energía renovables, las emisiones de CO₂ de las carretillas en funcionamiento se pueden reducir hasta en un 90%. Por lo tanto, la tecnología Li-Ion contribuye decisivamente a hacer que la intralogística sea más sostenible.
En 2011, Jungheinrich fue el primer fabricante de carretillas industriales del mundo en lanzar una carretilla producida en serie con una batería de iones de litio, ahora planea lograr una participación del 70% de las carretillas de iones de litio en la flota vendida de cara al año 2025.
La ETV 216i entregada al almacén de Amazon es una carretilla Jungheinrich POWERLiNE. Tanto en su diseño como en su construcción, las carretillas POWERLiNE aprovechan de manera consistente todas las ventajas de la batería de iones de litio. Son más cortas, seguras y cómodas que todas las demás carretillas industriales anteriores. Otra característica especial de POWERLiNE es que las carretillas son completamente neutras en CO₂ hasta que se entregan al cliente.
En términos de tecnología, las compañías incorporan sistemas de inteligencia artificial y análisis predictivo, además están adoptando medidas para reducir su impacto medioambiental y cumplir las regulaciones internacionales, y cómo no puede ser de otra manera buscando personal cualificado.
Bluebird mantendrá una administración independiente, y por su parte TSC Auto ID contribuirá a optimizar su sistema de gestión, generar sinergias mediante la integración de las hojas de ruta de los productos, fortalecer el soporte técnico y desarrollar iniciativas conjuntas en los ámbitos comercial y de marketing.
Comentarios