Logística farmacéutica: sin margen de error

La logística farmacéutica, tanto en el ámbito de la venta al por menor en farmacias, como la que se realiza en centros hospitalarios, no ha dejado de crecer en los últimos años. Una tendencia que ha ido a más durante la pandemia y con previsiones de aumentar su crecimiento en los próximos cinco años.

El 27 de diciembre de 2020 se iniciaba –ante la mirada escéptica de muchos ciudadanos–, la campaña de vacunación de la Covid-19, que implicaba, sin duda, la mayor operación nunca realizada por la logística farmacéutica del país. En aquel momento muchos medios de comunicación comenzaban sus artículos asegurando que el reparto de las vacunas –las cuales, además, debían ser almacenadas y transportadas bajo temperatura controlada– se realizarían utilizando todos los modos de transporte: aéreo, marítimo, ferrocarril y carretera.

Un año más tarde, aquella “operación”, casi de ciencia ficción, se puede decir, bien alto, que cumplió su objetivo. España ha logrado vacunar, con dosis completa, al 90% de la población, ello no hubiera sido posible sin el compromiso, la experiencia y el buen hacer del sector logístico.

Un sector que asumió el reto sin olvidar su actividad normal, la habitual del abastecimiento de farmacias y hospitales, y que recién iniciado el 2022 sigue también abasteciendo de vacunas, millones de dosis, al tiempo que asume otro gran reto: abastecer de test de antígenos, cuyo suministro es vía farmacia.

Crecimiento imparable

Con pandemia o sin pandemia lo que está claro es que la logística farmacéutica seguirá incrementando su actividad. Al menos así lo asegura el Global Pharmaceutical Logistics Market Growth 2021-2026, el estudio, a nivel mundial, más importante del sector. De entre sus conclusiones, la más destacada es la que indica que en el próximo lustro su “crecimiento será imparable”.

El informe, tras analizar la estructura actual del mercado, sus características y las previsiones de entrega de medicamentos, afirma que durante los próximos años el mercado de la logística farmacéutica registrará una tasa compuesta anual del 7,5% en términos de ingresos, mientras que el tamaño del mercado global alcanzará los 115.470 millones de dólares para 2025, dejando atrás todos los vaticinios de hasta hace algunos meses.

Ya en clave nacional, recientemente ha tenido lugar la jornada ‘Grandes tendencias y retos de la cadena logística sanitaria ante la nueva era del sector farmacéutico’, organizada por Alliance Healthcare y durante la cual expertos en logística de la industria farmacéutica apuntaron algunos de los aspectos sobre los que se basará el sector en el futuro cercano.

Entre las afirmaciones que se señalaron durante la jornada, destacan las realizadas por Remedios Parra, manufacturers & pharmacies director de Alliance Healthcare, que aseguró que “la logística sanitaria está cobrando una importancia creciente en los últimos años, es clave para el funcionamiento del sistema sanitario al impactar directamente sobre la seguridad y trazabilidad del producto, convirtiendo a la automatización del operador logístico en fundamental para asegurar la trazabilidad y calidad de servicio”.

Durante la jornada también se analizaron algunas de las tendencias que marcan actualmente la logística farmacéutica. Laia Aguilar, principal consulting and services de IQVIA, realizó una interesante ponencia en la que, entre otras afirmaciones destacó que “tanto en España como en el resto de Europa, los operadores logísticos van a tener que incorporar nuevas formas de distribución adaptadas a una realidad condicionada por el impacto de la pandemia. Lograrlo dependerá del grado de innovación del operador logístico”.

Y para innovar, al menos según el punto de vista de Aguilar, las empresas logísticas tendrán que apostar por la digitalización, “que ofrece grandes potencialidades para propiciar un acercamiento entre los diferentes agentes del sector, interactuar con ellos de otras formas y ofrecerles servicios más personalizados”.

La jornada, en palabras de Miguel Quintana, director de Alloga, también realizó su “particular” previsión de lo qué sucederá en el futuro cercano. Así, señaló que “planificar y analizar el comportamiento de la nueva demanda posconfinamiento se ha convertido en otro reto para los profesionales de la cadena de suministro. Y es un gran reto, porque la logística farmacéutica está acostumbrada a trabajar en entornos inciertos, pero en está ocasión no hay referencias equiparables en el pasado para predecir la reacción de la demanda, donde además de la pospandemia se le unen otros factores de incertidumbre, como el aumento de los costes energéticos o el precio de las materias primas”.

Hacia la hiperespecialización

La importancia de la logística farmacéutica ha convertido esta actividad en protagonista de varios eventos y jornadas profesionales a lo largo de los dos últimos meses del 2021. Congresos, jornadas, mesas redondas, presentaciones de nuevas tecnologías, entrega de premios (ver recuadro), que intentan mostrar el presente y futuro de una actividad que mueve millones de euros.

En este entorno destacó la jornada profesional celebrada por UNO, Organización Empresarial de Logística y Transporte de España, celebrada en Zaragoza bajo el título genérico ‘Logística farmacéutica: tendencias de un sector en expansión’, y que contó con la participación de la consejera de Economía, Planificación y Empleo del Gobierno de Aragón, Marta Gastón; la directora del Zaragoza Logistics Center (ZLC), Susana Val; y el presidente de UNO Logística,
Francisco Aranda.

Precisamente Aranda, en su intervención, pondría sobre la mesa uno de los grandes retos que deberán acometer a corto plazo los operadores logísticos especializados: la hiperespecialización. “El gran reto de la logística, un desafío en el que la logística farmacéutica tendrá un papel clave. Se ha conseguido en poco tiempo que la mayor parte de los ciudadanos estén vacunados, y eso ha sido gracias a la industria farmacéutica y a la labor de las empresas logísticas, que han sabido gestionar adecuadamente esa distribución con seguridad, trazabilidad y sin romper la cadena de frio”, subrayó Aranda.

En otro momento de su intervención, el presidente UNO puso en valor la situación estratégica de Aragón, “uno de los puntos logísticos más importantes de Europa y puede convertirse en un destino clave para las empresas de logística farmacéutica, pues ofrece seguridad jurídica e institucional y cuenta con una ubicación estratégica, un capital humano especializado y centros como el ZLC en los que se provee de talento; es, en definitiva, el Sillicon Valley de la logística”.

Por su parte, la consejera de Economía, Planificación y Empleo del Gobierno de Aragón, Marta Gastón, recordó que "Aragón tiene una enorme oportunidad en materia de intermodalidad, lo que, a su vez, impulsará la competitividad empresarial, sectorial y territorial" y señaló “las grandes fortalezas que posee el territorio para que ser un referente logístico a nivel internacional”.

“Disponemos de numerosas empresas especializadas, grandes infraestructuras y unas buenas redes de comunicación; además, trabajamos con todos los puertos de la península, tenemos la fortuna de contar con un aeropuerto kilómetro cero, que ha pasado a ser uno de los referentes
económicos y logísticos de España, y pronto contaremos con la autopista ferroviaria que unirá el Puerto de Algeciras con Zaragoza y permitirá que la logística siga siendo vector de todos los sectores económicos, incluido el farmacéutico", destacó Gastón.

“La colaboración público-privada y la agilidad para facilitar el crecimiento empresarial es también una realidad en el territorio, porque creemos que para hacer más atractiva la inversión se necesita estimular el crecimiento económico”, subrayó Gastón. “Además, somos un departamento que cree en la innovación, porque es una palanca de transformación hacia el
progreso empresarial y territorial; todo ello, nos ha traído momentos de gran satisfacción económica, nos ha permitido captar inversiones, y aprender a ser una comunidad competitiva llena de oportunidades”, añadió.

El frío, su gran aliado

La logística farmacéutica está viviendo uno de sus momentos más importantes desde el punto de vista de la actividad que genera. Si siempre ha sido un subsector en pleno desarrollo y crecimiento, lo acontecido con la llegada de la Covid-19 ha aumentado su importancia en el aspecto económico, pero también en el social.

El transporte de productos farmacéuticos, tanto en el mercado interno, como en la exportación, ha mantenido un crecimiento sostenido a lo largo de los últimos cinco años, lo que ha supuesto el espaldarazo definitivo de la logística sanitaria, tras demostrar que está perfectamente preparada para dar el servicio que le exigen fabricantes y distribuidores de medicamentos.

El nivel de actividad del transporte, así como el almacenaje de los medicamentos está directamente relacionado con el hecho de que la industria farmacéutica española es uno de los sectores de mayor peso de la economía superando en 2020 unos ingresos de más de 22.000 millones de euros, de acuerdo a la información facilitada por la consultora Statista.

Al mismo tiempo, las exportaciones de la industria farmacéutica suponen el 27% del total de la de productos de alta tecnología, según el INE. Un dato que influye directamente en el hecho de que exista en España un importante número de empresas, mayoritariamente operadores logísticos, que se han especializado en el almacenaje, transporte y distribución de medicamentos.

Temperatura controlada

Una de las dificultades que entraña la gestión logística de medicamentos es que éstos deben ser almacenados y transportados bajo temperatura controlada. Concretamente, según Farmaindustria, el 30% del total de productos farmacéuticos que se almacenan y transportan necesitan temperatura controlada.

Dicho de otro modo, los operadores logísticos deben disponer de las infraestructuras y vehículos industriales capacitados para mantener un riguroso control de la temperatura. Y deben hacerlo porque sus clientes se lo solicitan, pero, ante todo, porque deben cumplir con la normativa europea.

En la actualidad, la legislación que deben cumplir los operadores está recogida en una directiva comunitaria denominada Buenas Prácticas de Distribución, (Good Distribution Practices, GDP), que tiene como objetivo prioritario garantizar la seguridad, la calidad y trazabilidad en la distribución de medicamentos y productos farmacéuticos. En España, tras la correspondiente transposición, sus disposiciones han sido recogidas en el Real Decreto 782/2013.

Pero, ¿qué establece en concreto la directiva y, por tanto, el Real Decreto? En concreto, regula la implementación de sistemas de gestión de la calidad, con el fin de mitigar riesgos en la logística farmacéutica el registro documental de los datos ligados a cada producto, así como las responsabilidades, formación y normas de higiene para el personal que participa en las actividades de la logística farmacéutica.

De igual forma el Real Decreto 782/2013 también recoge aspectos que afectan directamente a la cadena logística, al regular las características específicas del equipamiento y las instalaciones para el almacenaje de productos médicos y los aspectos que tener en cuenta en la subcontratación de la logística farmacéutica, así como, las diferentes normas que se deben cumplir durante el transporte de fármacos y que afectan al tipo de vehículo especial que se utilice, a los contenedores, embalaje y etiquetado.

En definitiva, una compleja legislación que implica que fabricantes, distribuidores y operadores logísticos deban realizar fuertes inversiones en equipamientos y vehículos especializados. Se trata de conseguir un objetivo clave: no romper la cadena de frío.

Esto afecta, por supuesto, al almacenaje, pero donde realmente es complicado no romper la cadena de frío es durante el transporte, entre otros motivos, porque según el tipo de producto la temperatura será una u otra, desde cifras positivas al bajo cero. O sea, las compañías deberán poseer vehículos de transporte frigoríficos, pero también refrigerados e isotérmicos.

Llegados a este punto, la pregunta es si en la actualidad existen los operadores logísticos necesarios para dar servicio a unas necesidades de almacenamiento y transporte que no deja de crecer.

Los datos que ofrece la Asociación de Explotaciones Frigoríficas, Logística y Distribución, ALDEFE, responden con claridad a esta pregunta. Esta agrupación asegura que los operadores logísticos que actualmente dan servicio a la industria farmacéutica tienen instalaciones, distribuidas por toda España, capacitadas para cubrir las necesidades.

En total, en España existen más de siete millones de metros cúbicos en frigoríficos de servicio público y profesionales altamente especializados para la manipulación a temperatura controlada de cualquier producto que precise conservación a baja temperatura.

Se trata de un número importante de metros cúbicos, derivado del hecho, así lo recuerda ALDEFE, de que cualquier empresa frigorífica que almacena alimentos puede almacenar medicamentos. Eso sí, servirán siempre y cuando estén capacitadas para mantener la temperatura entre -18ºc y -27º c. Además, la tecnología actual permite, si es necesario, adaptar la instalación para lograr temperaturas más bajas aún.

Por lo que se refiere a la flota de vehículos bajo temperatura, la Asociación Española de Empresarios de Transportes bajo Temperatura Dirigida, ATFRID, cifra en más de 100.000 los vehículos pesados capacitados para dar servicio y transportar medicamentos bajo temperatura controlada. Eso sí, recuerdan que todos los transportistas que quieran trabajar en el sector farmacéutico y sanitario tiene que estar certificado por Qualipharma, entidad que asegura la correcta distribución de medicamentos.

Fragmento del reportaje publicado en el número 271 de Logística Profesional, páginas 6 a 12. Leer completo.