UPS quiere que en 2020 el 25% de su flota terrestres utilice combustibles alternativos
UPS se ha propuesto que para el año 2025 el 25% de la electricidad que consume proceda de fuentes de energía renovable, frente al 0,2% del pasado ejercicio. Asimismo, para el año 2020 la multinacional pretende que uno de cada cuatro de los nuevos vehículos adquiridos use combustible alternativo, en comparación al 16% de 2016.
Estos objetivos, disponibles en su Informe de sostenibilidad corporativa 2016, también establecen que en el 2025 el 40% del combustible que emplea para el transporte terrestre proceda de fuentes alternativas a la gasolina convencional y al diésel, frente al 19,6% de 2016.
Desde la firma aseguran que ya trabajan con más de 8300 vehículos de combustible alternativo, que incluyen vehículos eléctricos, híbridos eléctricos, híbridos hidráulicos, de gas natural comprimido, de gas natural licuado (GNL), de propano y de «carrocería ligera diseñada para el ahorro de combustible». A esto hay que añadir el consumo anual «de millones de litros de diésel renovable con menor huella de carbono y de gas natural renovable (GNR)».
Ambas empresas aportan su conocimiento local y, al combinarse con la experiencia tecnológica de Cargoboard, ofrecen una solución logística integral.
Estas certificaciones estarán vigentes durante tres años y con ellas se valida el esfuerzo de la compañía por elevar sus estándares operativos, garantizar un servicio de excelencia y promover un entorno laboral seguro y sostenible.
La compañía apuesta por el talento propio, aprovechando experiencia y conocimientos para mantener su posicionamiento como player destacado en el mercado.
El aumento de los ingresos fue del 22,6% con respecto a 2023, hasta alcanzar los 589,3 millones de euros. Tanto en Polonia como en el Reino Unido se observaron buenos resultados, así como en el segmento B2C en los mercados de Mondial Relay.
Su entrada en el país se produce tras el lanzamiento de su tecnología de conducción autónoma de nivel 4 (L4), la primera en Europa, que está operativa en las vías públicas de Berna (Suiza), con rutas de conducción autónoma que abarcan 65 kilómetros dentro de la ciudad.
Las ubicaciones cercanas a grandes núcleos urbanos o en corredores logísticos clave son un factor diferenciador que determina la capacidad de las empresas para responder a la creciente demanda.
Tiene capacidad para gestionar las agencias de transporte nacionales e internacionales, y permite definir zonas de entrega específicas, por lo que es una herramienta adecuada para cualquier operación logística moderna.
Estará operado por un transelevador con un vehículo satélite autónomo a bordo (ASV) y un sistema de transporte para conectar las áreas de producción y expedición con el almacenamiento.
Supone una nueva forma de adquirir las etiquetas que clasifican a los vehículos según su impacto medioambiental. Los usuarios solo deberán acudir a un estanco autorizado, facilitar la matrícula del vehículo y obtener el distintivo, previo pago, de manera inmediata,
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