En sus 1.100 hectáreas se concentran unas 500 empresas y cerca de 40.000 trabajadores. La actividad central se realiza en sus dos terminales de contenedores, que mueven alrededor de 4 millones de contenedores y lo convierten en el cuarto puerto del Mediterráneo.
La terminal del grupo en Barcelona ha demostrado su posicionamiento en la implementación de prácticas sostenibles, incluyendo la transición a equipos de manipulación de contenedores eléctricos y la adopción de energías renovables.
Tiene una superficie de 4.915 m2, distribuidos entre la zona de estanterías, con capacidad para alojar 2.100 ubicaciones de palés europeos, y una zona de playa de 2.500 m2.
Le permitirá concentrar toda la operativa en las mismas instalaciones. De esa manera se consigue ganar en eficiencia y minimizar el impacto ambiental gracias a un menor tráfico por el recinto portuario, con una reducción de emisiones y de tiempos de tránsito.
Esta implantación supone la primera empresa que se instala en la denominada 4.0, que permitirá habilitar unas 220 hectáreas más en Plaza para atender la demanda de grandes parcelas próximas a la capital aragonesa.
Con una inversión de alrededor de 12 millones de euros, pondrá en marcha las nuevas instalaciones que prevé tener finalizadas durante el segundo semestre de 2024. Se estima que emplee en torno a 100 profesionales.
La compañía utiliza semirremolques P400 que permiten la distribución combinada de mercancías por carretera, ferrocarril y barco desde Barcelona hacia otros países europeos sin necesidad de cambiar de remolque, lo que hace la operativa más versátil y eficiente.
Participará del intercambio de conocimientos y experiencias entre los actores clave de la cadena de suministro, incluidos los cargadores, transportistas, operadores y autoridad portuaria.
En la reunión, entre ACE y el presidente del Puerto de Barcelona, se trataron los retos que los cargadores deben afrontar en descarbonización, compliance o intermodalidad, para avanzar en la sostenibilidad del transporte de mercancías.
Se prevé que el proyecto básico esté terminado antes de que termine el año. Cataluña lidera el volumen de inversión en infraestructuras de toda España en el primer semestre del año, con 306 millones de euros, un 50% más que en el mismo periodo de 2021.
Busca reforzar el papel del Puerto de Barcelona como motor del crecimiento y la recuperación de la economía y favorecer las sinergias con la ciudad en este ámbito.