La escasez de personal cualificado y de materias primas, y la falta de incentivos conducirán probablemente a un aumento de las inversiones a corto plazo fuera del mercado nacional, principalmente a través del nearshoring y friendshoring.
Aprovechando las capacidades de ambas compañías, las organizaciones pueden beneficiarse de un flujo de información y un intercambio de datos sin fisuras, transformando sus cadenas de suministro mediante la creación de una mayor resiliencia y la gestión de riesgos.