LP Digital.- CHEP ha conseguido una vez más contar con el apoyo de los Tribunales de España y de toda Europa en el caso relativo a la sustracción y tráfico ilegal de las paletas azules. La sentencia dictada a favor de CHEP el pasado mes de septiembre en el Juzgado Penal de Badajoz ha servido para ampliar jurisprudencia y reforzar lo ya establecido en los juzgados europeos con respecto a este tema.
CHEP se encarga de la gestión de las paletas azules en régimen de alquiler manteniendo en todo momento el titulo de propiedad, con lo que cualquier acción de compra-venta está fuera de la legalidad. Las paletas son gestionadas por sus propietarios (empresas de pooling como es el caso de CHEP) y son alquiladas a fabricantes y productores que envían sus mercancías hasta la distribución comercial. Una vez allí, CHEP se encarga de recoger las paletas en los puntos finales de venta, inspeccionarlas y repararlas si fuera necesario antes de ponerlas a disposición del nuevo cliente. Por ello, las paletas nunca se venden sino que sólo se alquilan, ya que son “propiedad de CHEP”, como apunta la leyenda que se encuentra en cada paleta azul.
Sin embargo, algunas personas y organizaciones sustraen los equipos para lucrarse traficando ilegalmente con ellos, de ahí que CHEP colabore con las Fuerzas de Seguridad del Estado para acabar con este delito. Todas las denuncias realizadas ante el Tribunal de Justicia han dado la razón a CHEP.
Como apunta Laura Nador, vicepresidente y directora general de CHEP Iberia,“estos fallos judiciales confirman la ilegalidad que supone utilizar de manera ilegítima los activos propiedad de CHEP. CHEP seguirá persiguiendo, por las vías legales correspondientes, a quienes lleven a cabo estas malas prácticas para proteger tanto sus intereses como los de la cadena de suministro. CHEP ha llevado a los tribunales europeos este tipo de delitos en 30 ocasiones obteniendo 30 victorias. Como se puede ver la Ley es absolutamente clara”.
Los años de perturbaciones posteriores a la pandemia de la Covid-19 y las tensiones geopolíticas han aumentado las vulnerabilidades de la logística global. Junto a la Crisis del Mar Rojo, un ambiente geopolítico fluido con otros eventos que involucran al Canal de Panamá y el Mar de China Meridional se ha sumado a las preocupaciones comerciales.
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