Zaragoza Logistics Center (ZLC) es uno de los socios del proyecto Mobility4EU, cuyo objetivo es «trazar un plan de acción para el futuro de la movilidad en Europa» y elaborar «un documento que defina un nuevo modelo en el transporte de personas y mercancías en el continente de cara al año 2030».
El proyecto, dotado con casi tres millones de euros por la Comisión Europea y que tendrá una duración de tres años, desarrollará el plan teniendo en cuenta todos los medios de transporte y con la opinión de distintos agentes sociales implicados. «Los diferentes sectores de transporte se enfrentan a retos que, a veces, resultan contradictorios, por ello es necesario elaborar un plan de acción para la aplicación coherente de soluciones innovadoras y que debe ser respaldado por gran parte de la sociedad», señala la directora de programas de investigación del ZLC, Carolina Ciprés.
Para ello se ha configurado un equipo de trabajo multidisciplinar formado por 19 socios de Alemania, Francia, Bélgica, Italia, Grecia, Países Bajos, Reino Unido, Hungría, Finlandia y España. «Mobility4EU es una acción de coordinación que pretende crear ese plan sobre la innovación que hace falta en movilidad, pero no simplemente estudiando cada medio de transporte, como se ha hecho hasta ahora, sino teniendo en cuenta y analizando las necesidades y tendencias sociales en áreas como la salud, el medioambiente, la seguridad pública y ciudadana, el cambio demográfico, la globalización, el desarrollo económico o la digitalización e integración de sistemas inteligentes», explica Ciprés.
Dos socios españoles
ZLC, centro de investigación promovido por el Gobierno de Aragón en colaboración con el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), es el único socio español del proyecto (junto a la Autoridad del Transporte Metropolitano de Barcelona), ha sido invitado como promotor de la Plataforma Tecnológica Europea de Logística (Alice), y se le ha asignado el papel de «Líder de Tarea».
En concreto, encabezará la labor de derivar recomendaciones de este plan hacia las distintas unidades de políticas de la Comisión Europea, a las plataformas tecnológicas y a los países miembros. «El plan será muy amplio, pero luego, para hacerlo sencillo de uso para cada una de las partes interesadas, a cada unidad derivaremos las recomendaciones específicas que deberían aplicar», aclara Ciprés.
En el proyecto, que coordina la alemana VDI/VDE IT, participan organismos de investigación, empresas tecnológicas como Siemens, compañías del sector de las humanidades, despachos de abogados o centros medioambientales, entre otros. Los trabajos arrancaron el pasado 1 de enero con un primer encuentro de líderes de tareas, y ya en las próximas semanas tendrá lugar la reunión de lanzamiento en la que participarán todos los socios y empezarán a diseñar las distintas áreas de análisis.
«No solo somos 19 socios, sino que como cada uno está presente en una plataforma, tiene una red de contactos muy amplia, lo que le va a permitir involucrar a diversos agentes en las decisiones que vayan tomando», señala Ciprés.
De este modo, al ser un proyecto basado en el consenso, se utilizará la metodología «Multi-actor» y «Multi-criterio» (MAMCA) que permitirá llegar a una amplia mayoría de partes interesadas y posibilitará que todas las hojas de ruta que se vayan a realizar estén validadas por distintos actores de diferentes áreas, «lo que va a dar más valor a los resultados», concluye Ciprés.
Le permitirá cubrir hasta el 70% de sus necesidades energéticas con energía renovable y eliminar las emisiones de carbono asociadas a esta actividad. La incorporación de sistemas de generación solar en otras instalaciones ha contribuido a reducir cientos de toneladas de emisiones de carbono.
Comentarios